Nos comunicamos con Maria José Castro y nos cuenta que una parte se pudo apagar pero están cargando nuevamente de agua el camión de bomberos para combatir el fuego en otra parte del monte.

Su preocupación es si luego de extinguir el fuego no se puede quedar algún bombero de guardia porque cualquier viento puede generar nuevamente otro foco ígneo, muy razonable su preocupación ya que se controlaría rápidamente de haber una guardia de bomberos, de lo contrario mientras regresan al lugar cualquier fuego pasaría a mayores.

Esperamos que prime el sentido común.