Peñarol conquistó este domingo el Torneo Intermedio uruguayo tras imponerse a su más enconado rival, Nacional, por 5-3 en una tanda de penaltis tras 120 minutos de juego sin goles.
Tras nueve superclásicos jugados sin obtener una victoria, el Aurinegro hoy puso fin a la mala racha con un trofeo que comenzó a jugarse en 2017 y que hasta el momento no había podido conquistar.
En un partido que dominó frente a un rival que tuvo como gran figura al portero panameño Liuis ‘Manotas’ Mejía, el equipo dirigido por Diego Aguirre se impuso en los detalles y además tuvo la suerte de no escapar ileso en la última jugada del partido.
Fortalecido por la velocidad de Pedro Milans y Javier Cabrera, Peñarol volcó en el comienzo del encuentro su juego hacia el sector derecho del ataque y por allí complicó a un Nacional que se mostró firme en el fondo.
Fue por el sector izquierdo por donde llegó la más clara para el Aurinegro, cuando Maximiliano Olievera habilitó a Cabrera y un remate suyo encontró una buena respuesta de Luis Mejía.
Leonardo Fernández y Maximiliano Silvera también acercaron al Aurinegro, aunque sin mayor peligro para el portero panameño, quien retornó de su paso por la selección y reemplazó a Ignacio Suárez.
Martín Campaña evitó volando lo que era gol de Sebastián Coates tras un gran cabezazo del capitán tricolor luego de un tiro de esquina ejecutado por Nicolás López.
Después de esa jugada, los de Pablo Peirano se acercaron más a la portería rival, aunque también sin mayor peligro.
Los primeros 45 minutos se fueron sin goles y con una amarilla por lado tras duras faltas de Nahuel Herrera y de Nico López. En los otros 75 minutos aparecieron muchísimas más tarjetas.
En el comienzo del segundo tiempo, un libre directo de Leo Fernández fue neutralizado por ‘Manotas’ Mejía, mientras que Milans se lo perdió por muy poco.
Nacional se adueñó del balón en varios momentos, pero no pudo transformar el dominio en situaciones de gol, por lo que la segunda parte también se fue 0-0 y obligó a jugar el alargue.
Allí Peñarol tuvo a los pocos minutos una situación muy clara por intermedio de David Terans, a quien Mejía le ahogó el festejo en un mano a mano. Rodrigo Pérez también acercó al Aurinegro.
El Tricolor tuvo la más clara en la última pelota, cuando Olivera salvó a su equipo, luego de que Lucas Villalba dejara por el camino a Campaña y quedara listo para marcar a portería vacía.
El cansancio pudo más que el juego y el partido se fue con un empate directo a la definición desde los doce pasos, donde Campaña se agigantó para frenar el disparo de Gonzalo Carneiro.
Esa parada, sumada a las anotaciones de Terans, Leo Fernández, Leonardo Coelho, Stiven Mulhetaler y Leando Umpiérrez le dieron el título a Peñarol, que rompió la mala racha en los Clásicos y se tomó venganza de lo que había sucedido en la temporada pasada, cuando el mismo título se le escapó ante el mismo rival en los penaltis.
Fuente: Medios Públicos