Para los especialistas volver a las actividades mejorará los trastornos que provocó la emergencia sanitaria en los niños.
La Sociedad Uruguaya de Pediatría (SUP) comparte plenamente el regreso de los niños a las clases presenciales, ya que consideran que la vuelta a la actividad es un “factor protector” para los alumnos que estaban sufriendo problemas emocionales como la ansiedad, el trastorno del sueño y aumento de peso.
La presidenta de la SUP Catalina Pinchak explicó que aumentar las horas es un “factor protector que tiene mucho de equitativo, sacamos al niño de un lugar donde hay mayor posibilidad de otros daños como los emocionales, y los ponemos de cara a lo que venían haciendo de forma progresiva”.
Los pediatras han detectado que algunos trastornos que se pueden constatar en los niños, debido a la suspensión de sus actividades, son la falta de sueño, la ansiedad, el sedentarismo y el cambio de hábitos.
Pinchak destacó la necesidad de que los maestros puedan tener informados a los niños pero “sin miedo y respetando las medidas”.
La presidenta aseguró que crecieron las consultas de los padres a los pediatras sobre el regreso a clases de los niños. Pese a que dijo que no “existe el riesgo cero”, aseguró que el aumento de horas “va a mejorar muchas variables que también son importantes” y remarcó la necesidad de seguir manteniendo las medidas sanitarias correspondientes como lavarse las manos, usar tapaboca y mantener la distancia establecida.
Fuente: Subrayado
